Mensajes para Marcos Tadeu Teixeira en Jacareí SP, Brasil

 

sábado, 14 de mayo de 2016

Mensaje de María Santísima

 

(María Santísima): Mis queridos hijos, hoy os invito de nuevo al amor, al amor a las obras, al amor a los sacrificios y a las renuncias como el amor de Mis Pastorcitos de Fátima, como el amor de Mi hijito Marcos.

Vivid este amor entregándoos cada vez más a Dios y a Mí, renunciando cada vez más a vuestra voluntad. Y, sobre todo, reavivando a cada instante Mi llama de amor en vuestros corazones rezando el acto incesante de Amor. Haciendo muchos actos de amor, de renuncia, de entrega total a Dios y a Mí durante el día.

Para que así como el combustible aumenta la llama, así estos pequeños actos de amor, de entrega, de renuncia, aumenten en vuestros corazones la llama del verdadero amor a Dios y a Mí.

Si vosotros, hijos Míos, vivís el verdadero amor como Mis Pastorcitos de Fátima, como vivió y vive Mi hijito Marcos. Así también podré hacer Mis maravillas en vosotros, en vosotros también podré realizar los grandes planes del Señor, los grandes planes de Mi Corazón Inmaculado que os transformarán en los Santos más perfectos y bellos que el mundo haya visto jamás. Y a través de vosotros Dios triunfará, mi Corazón Inmaculado triunfará y mi enemigo será finalmente derrotado de forma humillante.

Os invito, pues, a todos a ser el amor y a dar a Dios y a Mí, el amor de las obras, el amor de la renuncia, el amor de la entrega total, el amor de la obediencia, el amor de la fidelidad.

Marcos, Mi incesante Llama de Amor, en ti, en ti he realizado y realizaré aún muchas maravillas. Te sorprende que te prometiera el Cielo en la Aparición del 4 de diciembre de 1993, sí, te prometí el Cielo y como te prometí te llevaré allí.

Pero no os daré simplemente el Cielo, os haré entrar en el Cielo con un grado de gloria muy elevado, muy grande. No entrarás en el Cielo con un pequeño grado de gloria. ¡Oh, no! Te he hecho trabajar duro por Dios y por Mí para la salvación del mundo. Te he hecho ejercitar las virtudes, te he hecho rezar mucho, te he hecho renunciar a todo, también te he hecho llevar una cruz muy pesada del tamaño del mundo, para que tú, hijo Mío, puedas entrar en el Cielo, pero no simplemente entrar en el Cielo con un pequeño grado de mérito para tener allí un pequeño grado de gloria.

Te haré entrar en el Cielo con un gran grado de mérito para que allí tengas un grado de gloria muy grande, de hecho, uno de los mayores grados de gloria entre los bienaventurados del Cielo.

Por tanto, debes sentirte feliz, porque te daré el Cielo, pero no tendrás en el Cielo un pequeño grado de gloria, tendrás un gran grado de gloria por la vida de grandes obras, grandes oraciones, sufrimientos y sacrificios que te he hecho tener aquí en la tierra.

Alégrate por esto hijo mío, porque he pensado en todo y he predispuesto todo en tu vida, para que todo te lleve al Paraíso, pero no con un pequeño grado de gloria, ni con un pequeño grado de visión bienaventurada. Sino para que tengáis un gran grado de gloria y un gran grado de Visión Bendita en el Paraíso.

Felices vosotros, felices los que os dan la mano y se dejan conducir por vosotros a este Cielo, porque también se les dará una gran recompensa por su confianza, por su amor de docilidad y perseverancia con vosotros.

Continuad rezando cada día mi Rosario, porque por medio de él se os aumenta cada vez más un grado de gloria en el Cielo, se os conceden muchas gracias en la tierra. Y verdaderamente mi Corazón Inmaculado se complace en todos vosotros y derrama sobre vosotros las grandes y copiosas gracias del Señor.

A todos bendigo con amor desde Fátima, Kerizinen y Jacari».

Orígenes:

➥ MensageiraDaPaz.org

➥ www.AvisosDoCeu.com.br

➥ www.AparicoesDeJacarei.com.br

El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.