domingo, 23 de octubre de 2016

Domingo, 23 de Octubre de 2016

Domingo 23 de octubre de 2016: (Misa en rito oriental)

Jesús dijo «Hijo mío, anoche te di un mensaje sobre el infierno, para que rezaras más por los pecadores que corren más peligro de caer en el infierno. En el Evangelio de hoy te conté la parábola del rico y el mendigo Lázaro. Lázaro estaba a la puerta del hombre rico, deseando comer las sobras de su mesa, pero nadie le ofrecía nada de comer. Sólo los perros lamían las llagas de Lázaro. Al morir, Lázaro fue al cielo, pero el hombre rico se encontró en los fuegos eternos del infierno. El rico quería agua para su lengua reseca, y Me pidió que advirtiera a sus hermanos que no vinieran al infierno. Le dije que tenían a Moisés, los profetas y la Torá para guiarles. El hombre rico quería que Yo enviara a alguien de entre los muertos para que hablara a sus hermanos del infierno. Le dije que si los hermanos no escuchaban a Moisés y a los profetas, tampoco escucharían a uno que resucitó de entre los muertos. Yo soy el único hombre que resucitó de entre los muertos para ofrecer a todos la salvación, pero aún así hay almas que no quieren creer en Mí. En la visión te mostré cómo Mis fieles tienen que entrar en el cielo por el camino estrecho. Es el demonio quien intenta que las almas sigan el camino fácil y ancho hacia el infierno. Así que escucha Mis palabras de amor, para que te arrepientas de tus pecados y estés preparado para entrar en el cielo. Aquellas personas que siguen los placeres y las riquezas de este mundo sin arrepentirse, están siguiendo verdaderamente al diablo por el camino ancho del infierno. Así que, de nuevo, pido a Mis guerreros de la oración que dediquéis vuestro tiempo extra a rezar por los pecadores, pero especialmente por los pecadores que están alejados de Mí, y en mayor peligro de perder sus almas en el infierno.»

Jesús dijo: «Pueblo mío, cada vez que venís a Misa, celebráis la Comunión de los Santos. Ésta es una unión de los santos del cielo, que representan a la Iglesia Triunfante, de las almas del purgatorio, que representan a la Iglesia Doliente, y de las almas de la tierra que no han sido juzgadas, que representan a la Iglesia Militante. Me habéis visto animaros a rezar por las almas de la tierra para que se salven del infierno. También a veces os he animado a rezar por las almas del purgatorio para que un día pudieran ser liberadas de su sufrimiento. De diversas maneras os he estado instando a que no gastéis vuestro tiempo en placeres frívolos, sino que dediquéis más tiempo a rezar por los pecadores y por las almas del purgatorio. Si insistís en rezar por la salvación de las almas de vuestros parientes, escucharé vuestras oraciones y se les concederá la oportunidad de salvarse. Cuando meditáis sobre la Comunión de los Santos, sois testigos de Mi gran plan de salvación para las almas, que eligen serme fieles. Las almas del cielo están salvadas y las del purgatorio también, pero necesitan tiempo para purificarse. Por eso estáis viendo una verdadera batalla por las almas en la tierra, porque las almas aún pueden perderse en el infierno. Así que recuerda dedicar todo el tiempo que puedas a rezar para salvar a los pobres pecadores y a rezar para liberar a las almas del purgatorio».

Jesús dijo: «Pueblo mío, cuando vengas ante Mi Presencia Real en la Hostia consagrada, quiero que seas humilde y rindas reverencia a Mi Santísimo Sacramento. No os sintáis mejores que ningún otro pecador, porque Yo os veo a todos como almas iguales y hermosas ante Mí. Todo lo que tenéis y todos vuestros logros han sido fruto de Mi gracia, así que no penséis que habéis conseguido cosas por vosotros mismos en vuestro orgullo. Sin Mi ayuda, no tendrías nada. Dependes totalmente de Mí para todo. Por eso debes agradecerme cada día lo que te ayudo a hacer. Cuando rezas, estás compartiendo tu amor Conmigo en oraciones de Adoración, adoración, petición, acción de gracias y oraciones de ayuda a las personas. Son tus oraciones por las almas las más importantes ahora, porque tu tiempo es corto para salvar almas antes de que Yo traiga Mi Advertencia y permita la tribulación venidera. Veo que muchos de Mis fieles pierden su precioso tiempo en cosas que no ayudan a las almas. No sé cuánto más puedo insistirte en que las oraciones por los pecadores son necesarias ahora, más que nunca. Muchas almas están a punto de perderse en el infierno, especialmente a manos del Anticristo. Reza para que estas almas se salven, y prepárate para evangelizar a las almas después del Aviso, cuando las almas estarán más abiertas a tus esfuerzos de evangelización. Salvar almas con Mi ayuda es vuestra vocación más importante».