lunes, 7 de septiembre de 2020

Todos los que te escuchen me escucharán. Todos los que te desprecien, me despreciarán.

(Sagrado Corazón): Mis almas elegidas, mi Sagrado Corazón se alegra de verlos a todos hoy aquí, de verlos a todos, mis hijos, hoy aquí.

Hoy recuerdan la maravillosa señal de la luna que se movió en el Cielo de un lado para otro, que Mi Madre y Yo les dimos a todos ustedes, a toda la humanidad, aquí el 7 de septiembre de 1994.

Con esa señal confirmé la verdad de Mis Apariciones con Mi Santísima Madre aquí por siempre y di a todos, a todos mis hijos, la señal clara e inconfundible de mi amor, el amor de Mi Madre y la misericordia de Nuestros dos Corazones Unidos para todos ustedes, para toda la humanidad, especialmente para las almas más pecadoras.

Deseo que ahora sus corazones, mis hijos, correspondan a este tan grande amor y misericordia que Yo y Mi Bendita Madre les hemos mostrado en Nuestras apariciones aquí.

Abran sus corazones a Nosotros, den Nuestros corazones a Nosotros y vivan verdaderamente Nuestros mensajes de amor, porque son los únicos medios con los cuales Nuestros Corazones pueden ayudarlos y salvarlos guiándolos al Cielo por el camino de la oración y penitencia.

En estos tiempos en que se desprecia y rechaza la fe y la cruz, ustedes deben ser la gran señal de luz de mi amor para toda la humanidad, como lo es Mi pequeño hijo Marcos.

Sí, en toda su vida manifiesto mi gran luz, mi gran gracia y mi gran amor por toda la humanidad.

En todas las obras de amor que ha hecho por Mí y por Mi Bendita Madre, manifiesto a toda la humanidad la grandeza de mi gracia, mi amor y mi gloria. Y no hay alma que no pueda ver o reconocer a través de él mi rostro amado y el rostro amado de Mi Bendita Madre aquí.

Por lo tanto, mis hijos, den también ustedes el 'sí' de sus corazones a Mí, a Mi Madre, y por medio de ustedes Nosotros también manifestaremos al mundo: Nuestro amor, Nuestra gracia y Nuestra misericordia.

Oren el Rosario todos los días, porque aquel que lo reza nunca será abandonado por Mí, ni jamás será despreciado por mi Padre celestial.

Aquí en estas Apariciones he manifestado Mi amor en toda su plenitud y si el alma tiene verdadero amor por Mí, también le daré gracias en la plenitud de Mi amor.

Sí, el mar es mi amor, el mar es mi gracia y el barco debe ser el amor de sus corazones. Si tienen el barco del verdadero amor, podré soplar mi poderosa gracia a sus vidas guiándolos al puerto de salvación y con ustedes muchas, muchísimas almas.

Denme su 'sí' y Yo actuaré y haré todo.

Los bendigo a todos con amor, especialmente a ti, mi amado pequeño hijo Marcos. Creíste Mi promesa y la promesa de Mi Madre el 7 de junio de 1994 que tres meses después les daríamos la gran señal.

Tuviste fe y tu fe fue recompensada con esa resonante señal. Hice esto también para mostrarle a todo el mundo cuánto los amo, y también cuánto Mi Madre los ama, porque la señal que le pedí a los fariseos que les diera en el cielo y que incluso Mis apóstoles querían ver y que yo les negué, se las dí a ustedes porque tanto los amo, los considero y los quiero, hijo mío.

¡Adelante, hijo de luz, apóstol de la luz! Hijo y heredero de todos los bienes de Mi Sagrado Corazón, secretario de mi paz y la paz de Mi Madre, administrador de mis gracias y las gracias de Mi Madre.

¡Avanzad! Continuad anunciando Nuestras palabras con valentía y fervor a todo el mundo. Todos los que te escuchen me escucharán. Todos los que te desprecien me despreciarán. Tú eres mi apóstol, tú eres mi mensajero y profeta para las naciones.

Quien os escuche me escuchará, quien os desprecie me despreciará!

Eso es lo que les dije a Mis apóstoles y eso es lo que les digo a ustedes, los últimos de mis apóstoles y mi verdadero guerrero del amor.

¡Adelante! Los bendigo con Mi Bendita Madre y todos aquellos que verdaderamente crean en Nuestros mensajes ahora: desde Dozulé, desde Paray-Le-Monial y desde Jacareí".

(María Santísima): "¡Soy la Reina y Mensajera de Paz! Hijos míos, hoy cuando celebran aquí el Aniversario de mis Apariciones, el aniversario mensual con mi hijo Jesús, vengo otra vez a decirles:

¡Paz! ¡Paz! ¡Paz! ¡Paz en sus corazones! No teman, al fin triunfará mi Inmaculado Corazón.

¡Paz! ¡Paz! ¡Paz! Nada perturbe la paz de ustedes. Toda perturbación viene de Satanás, renúncienle a él y a toda perturbación y acojan el divino don de paz que he venido a traerles.

Ámense los unos a los otros como yo los amé, ¡esto es paz!

Cuando el mundo experimente lo que mi hijo Jesús dijo, finalmente toda la humanidad tendrá paz.

Difundan el amor de mi Hijo y mi amor por todas partes y entonces reinará la paz.

Lleven mi medalla de la paz que es un instrumento y un poderoso medio de gracia y paz, para que pueda alcanzar a todos mis hijos con mi luz maternal, toque, convierta y atraiga a todos mis hijos al Señor por mí.

Vengan aquí cantando y orando en procesión, beban del agua de la fuente, lávense en la fuente para purificar su cuerpo y alma y entonces serán sanados.

Hablen menos, ¡oren más! Digan menos, trabajen más.

Sean mis apóstoles, los apóstoles de la luz y el amor de mi Inmaculado Corazón para toda la humanidad.

Vivan mis mensajes, recen mi Rosario todos los días, porque aquel que reza mi Rosario será proclamado hijo mío y hermano de mi único Hijo Jesús, ante los Ángeles y Santos del Señor.

Nunca, nunca se ha perdido un verdadero devoto de mi Rosario. Rézalo y les prometo a la hora de la muerte todas las gracias necesarias para la salvación y mi ayuda maternal.

Oren, ayunen y ofrezcan sus enfermedades y sufrimientos a Dios por la conversión de los pecadores más endurecidos, porque hay pecadores que solo pueden ser convertidos por el poder místico de la oración, el ayuno y el sufrimiento ofrecido.

Oren para ayudarme a destruir los planes de Satanás. Él es fuerte y desea destruir mis planes de salvación y paz de la humanidad.

Recen el Rosario de Paz meditado todos los días, el Rosario de Lágrimas y el Rosario del Triunfo, y entonces podremos neutralizar completamente a Satanás hasta hacerlo impotente y podemos incluso convertir muchas de sus obras y planes en victorias para el Señor y para ustedes.

Den 5 películas de mi Aparición en Lourdes #6 a mis hijos que no me conocen, para que luego puedan conocer mi amor y mi bondad. Y 7 películas de mi Aparición aquí, Voces del Cielo #3, para que mis hijos puedan ver, saber y reconocer que estoy aquí. Sepan cuánto los amo y así vengan todos a mi Inmaculado Corazón para que finalmente pueda abrazarlos, amarlos, abrirlos con mi llama de amor y guiarlos a todos por el camino de la oración, conversión y santidad al Cielo.

Los bendigo a todos y especialmente a ti, mi pequeño hijo Marcos. Sí, en 1994 fuiste digno de grandes señales del Señor y de mi amor. La luna que se movió en el Cielo, el milagro del Sol, la cruz en el Cielo, el milagro de la vela que no quemó tus manos y tantas otras gracias.

Sí, fuiste digno de muchas grandes señales y aún más gracias serás digno.

Por lo tanto, adelante, secretario de mi paz y administrador de mis gracias. ¡Adelante! Continúen anunciando a todo el mundo mi mensaje de paz y amor y también continúen ofreciendo todos los muchos méritos de sus obras de amor por mí, tus dolores de cabeza y tus sacrificios. Para que entonces pueda transformar todo en gracias de salvación para las almas y de victoria para el Señor en las naciones y en todo el mundo.

Fuiste digno de grandes señales, fuiste digno de tener mi Santo Rostro con mi hijo viviendo junto a mí en esta imagen milagrosa y muchas más gracias serás digno.

Así que adelante! ¡Adelante, hijo mío! Por ti triunfará mi Inmaculado Corazón y el imperio infernal será derrocado.

Los bendigo a ustedes y a todos mis amados hijos: desde Lourdes, Pontmain y Jacareí.

También te bendigo a ti, mi querido hijo Carlos Thaddeus. Te tengo en mi Inmaculado Corazón y derramo sobre ti ahora 422 gracias, fruto del sacrificio del dolor de cabeza que tu hijo ofreció por ti esta noche y también, las cuales te doy desde mi Corazón.

Regocíjate, porque te di un hijo en quien manifesté el signo del rayo de luz, que no manifesté ni siquiera en muchos hijos muy santos y amados de mi Corazón que ya han estado en la tierra.

Te di lo mejor de lo mejor para demostrarte cuánto te amo.

¡Adelante! Continúa con todas las oraciones que te he pedido. El domingo te daré un mensaje.

Paz, mi querido hijo".

Video de la Aparición y Mensaje de este día:

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