miércoles, 6 de agosto de 2025

Alégrate Porque Tu Nueva Vida Está Cerca, Pasarás A Otro Mundo Y Gozarás De Todo Lo Que El Señor Ha Preparado

Mensaje de la Santísima Virgen a Myriam Corsini en Carbonia, Cerdeña, Italia, el 30 de julio de 2025

María Santísima:

En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, te bendigo.

Esta colina sagrada pronto será iluminada por la luz del Dios Vivo. Él se manifestará en este lugar, y en Su luz resplandeciente abrazará a todos Sus hijos, los bendecirá y los elevará hacia Sí.

Mis queridos hijos, siempre estoy aquí con vosotros, nunca os abandono. Hoy estoy embelesada por el hecho de que tantos de vosotros estéis aquí, reunidos en oración con el Santo Rosario, el arma que combate al Maligno y lo enfurece. Su intervención será inminente: se desatará la batalla, pero los hijos de Dios estarán a Mi lado y serán guiados y protegidos por Mí. Saldrán victoriosos, vencerán en Cristo el Señor, Mi Hijo y vuestro Señor Dios.

Cread un corazón puro, hijos Míos, preparaos para el acontecimiento venidero: ... Jesús está cansado, el Padre está cansado de esperar, no hay más tiempo, hijos Míos.

He aquí que Jesús se llevará consigo a todos aquellos que se han convertido, que se han arrepentido de sus pecados y con el corazón contrito piden perdón y anhelan ser abrazados por el Padre para volver al Hogar.

El pensamiento de Dios es acoger en Sí a todos Sus hijos, llevarlos a Sus Moradas, hacerles vivir en la felicidad eterna, esa felicidad que ya había preordenado para Sus hijos en la Creación.

El hombre, Su criatura, fue insuflado a la existencia por Su aliento, recibió la vida y se hizo partícipe de la divinidad de Dios, pero al caer en el pecado, el hombre perdió esta gracia a causa de su desobediencia a Dios.

Hoy, hijos Míos, el Cielo está aquí en esta Colina, sois bendecidos, abrazados y guiados.

Amados hijos, no tengáis miedo de lo que tendréis que afrontar, alegraos porque vuestra nueva vida está cerca, pasaréis a otro mundo y gozaréis de todo lo que el Señor ha preparado para Sus hijos, para Sus elegidos.

Ha llegado el momento, ya no hay que esperar más, preparaos, preparaos con un corazón puro, ahora vuestros ojos no sólo verán los desastres que hay en el mundo, sino que verán y conocerán las maravillas de Dios.

Amén.