Revelaciones Marianas a Luz de Maria, Argentina
domingo, 18 de septiembre de 2016
Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo
A Su Amada Hija Luz De María.

Pueblo Mío:
Yo os bendigo. No seréis abandonados por Mí, en ningún instante.
Se Mi Propio Amor, Sé Honesto, Justo, Caritativo, De Buen Corazón, Cuidadoso En El
Trato De Tus Hermanos Y Hermanas, Sé Amable Con Tus Prójimos; La Buena Acción Es Alabanza Ante Mí.
Cada persona debe tener presente cómo se encuentra espiritualmente. Si tenéis esto presente, podréis hacer propósito de enmienda, y os apartaréis de las tinieblas, del trato injusto hacia vuestros semejantes. Algunos de Mis hijos miran en su interior exclusivamente en lo que corresponde al trato directo Conmigo. Mis hijos deben ser un reflejo de Mi Amor. Lamento que para algunos de mis hijos esta Palabra no esté contemplada en sus vidas.
El Amor ha sido suplantado por el «Yo soy», descartando la posibilidad de ablandar el corazón de piedra, y esto da lugar a criaturas egoístas y arrogantes, que no toleran ni respetan el trabajo y la acción de sus semejantes, imponiéndose a sus hermanos y hermanas. Quien actúa así se convierte en un tormento para sus hermanos y hermanas, para su propio metro cuadrado y para sí mismo. Hijos, no debéis imponeros, debéis ser amados y no temidos.
En Mi Pueblo, todos se necesitan, todos son hermanos, todos se ayudan mutuamente, todos son generosos y conservan en la memoria y en el corazón las ocasiones en que fueron ayudados por un hermano. Hijos míos, es importante que no olvidéis las buenas acciones de vuestros hermanos y hermanas hacia vosotros: esto forma parte del Amor. No permitáis que el orgullo, que se extiende por la humanidad a través de los espíritus del mal, erradique la humildad que debe habitar en vosotros. Encontrarás Mi ayuda cuando la solicites, y lo que antes era aflicción se convertirá en deleite si permites que Mi Espíritu te perfeccione en tus debilidades.
Pueblo Mío
EL PENSAMIENTO Y LA MEMORIA, PARA ALGUNOS DE VOSOTROS, SE HAN CONVERTIDO EN UN GRAN IMPEDIMENTO PARA
CONTINUAR El Camino En Verdadera PAZ. Vivís del pasado, en lo que no fue, y olvidáis Nuestra Voluntad, añoráis situaciones pasadas y esto se convierte en una gran fuerza que os retiene. Quien anhela el pasado se quedará en el camino, este impedimento del pasado os mantendrá atados y os impedirá ver el instante y entregaros a Nuestra Voluntad.
Algunos se aferran tanto al pasado que viven inmersos en los recuerdos, en los instantes de adversidad que vivieron, y la amargura, el resentimiento o la ira brotan, repetidamente, hasta convertirse en una raíz que les oprime y les hace vivir en una amargura constante. El hombre deja que el pasado le atormente y el mal se sirve de ello para manteneros atados.
Vosotros, hijos Míos, debéis entregarme vuestra mente y permitir que Mi Espíritu os guíe y os lleve a meditar en Mis Promesas, para que Yo lo someta todo a Nuestro Dominio Divino y para que lo que os atormenta no siga siendo un impedimento para entregaros a Nuestra Voluntad.
En este instante, hay tantos hijos que se contentan con ver la salvación de lejos, pues sienten que no necesitan alcanzarla, sino que se contentan con verla de lejos. Por ello, llamo constantemente a mis ministros para que sean testigos de Mi Obra y de Mi Acción, ya que el hombre guarda Mi Palabra en su memoria y en este instante os exijo que insistáis en el correcto Amor, la correcta y adecuada Obediencia, la necesaria Fe y la correcta conducción de Mis Ministros para que Mi Pueblo no se pierda en banalidades.
Mis hijos deben fortalecerse constantemente con Mi Palabra, Mis hijos deben fortalecerse con Mi Palabra para que el mal no les coja por sorpresa por no reconocer lo que es Mío.
No podéis juzgaros a vosotros mismos, el ser humano no es competente para ello, pues siempre tiende a ver lo bueno en sus obras y acciones o a barnizar con bueno lo que no lo ha sido.
Por eso, os conduzco a purificar vuestros sentidos para que, en este camino, os desprendáis de las justificaciones personales y Me permitáis mostraros los impedimentos que permanecen encarnados en vosotros y os impiden llegar a Mí.
Esta generación está cometiendo grandes abominaciones contra Nuestra Voluntad, cometiendo sacrilegios como nunca antes había cometido el ser humano, demeritan a Mi Madre, negando Su Pureza Virginal y Su Maternidad hacia toda la Humanidad. Esta generación peca constantemente contra Mi Santo Espíritu, olvidando que la vida del hombre pende de Nuestra Voluntad.
No cree en la explicación de Mi Palabra y se burla de los Llamamientos de Mi Madre, negando la urgente purificación de esta generación antes de que se pierdan los justos.
El pecado es el alimento de la Humanidad, aumentando sobre la Tierra el ejército de satanás, el que atacará Mis Templos por todo el mundo, con el deseo de extinguir todo recuerdo de Mi presencia en la Tierra. Ante tales acciones la Advertencia no se hará esperar, para que algunos de Mis hijos vuelvan al camino de la Verdad.
Insisto en que conozcas Nuestra Palabra Divina para que, conociéndola, ames a Nuestra Divinidad con intensidad y en verdad.
Es Necesaria Una Fe Firme, Fuerte Y Decisiva: Fe Que Es Indisoluble Y Vivida En
CADA Instante, En Cada Acontecimiento, Para Que Logres Vencer Las Atrocidades Del Mal.
Es Necesaria La Entrega De Cada Uno De Mis Hijos: La Decisión De Vivir En Nuestra Voluntad, La Disposición Hacia La Unidad, La Hermandad.
VOSOTROS No Sois Del Mundo, Hijos, No Permitáis Que El Mundo Os Lleve.
Debéis Vivir En Constante Expectación Y En El Cumplimiento De Nuestra Voluntad.
No Miréis Lo Que Es Mundano. Vosotros No Sois Mundanos, Ninguno De Mis Hijos Está Destinado A La Mundanidad, Ninguno Debe Vivir Oprimido Por Satanás.
VOSOTROS Sois Mi Propiedad, Yo Os Redimí Con Mi Sangre.
ALIMENTAOS Con Mi Cuerpo En La Eucaristía, Debidamente Preparada.
ACOMPAÑADME En El Tabernáculo Y Esforzaos Para Que Vuestra Vida Sea Un Acto Constante De Amor Dentro De Vosotros Y Hacia Vuestros Hermanos Y Hermanas.
Quiero Hogares Que Vivan En Mi Amor, En Paz, En Mi UNIDAD. Cuando no hay paz en los hogares o ésta se quita instantáneamente, los espíritus malignos se apoderan del hogar y crean rebelión, haciendo que algunos vean mal las acciones de los demás, haciendo que alguien dentro del hogar sea intolerante con las acciones de los demás miembros de la familia, y así las pequeñas cosas se convierten en grandes tormentos destructivos.
Hijos, el demonio ataca al hombre, ataca a la unidad, ataca a la familia, siembra la discordia y vacía de amor el corazón del hombre, PARA QUE EL HOMBRE NO SIENTA LA NECESIDAD DE SER UN TEMPLO DE MI AMOR HACIA SU PRÓJIMO.
La batalla de SATÁN es contra Mi Amor, contra la Unidad, por tanto contra la Familia, contra la Moral, contra Mi Madre, porque sabe que Mi Madre, en unión de San Miguel Arcángel y las Legiones Celestiales, lo aplastará y lo arrojará a las profundidades del Infierno.
Pueblo Mío, no desprecies Mis Llamadas, pues satanás y los espíritus malignos esparcidos por la Humanidad siguen activos, buscando presas que tomar. Mis hijos no deben luchar contra Mis hijos; tal lucha fortalece el mal.
No me defiendas, pues lo que no es Mío cae y lo que es Mío prevalece; no confundas a Mi Pueblo más de lo que el mal lo tiene confundido. EN SU LUGAR, Rezad y haced penitencia.
Rezad niños, rezad por Italia, tendrá su ración de sufrimiento. La naturaleza se precipita contra Italia, será duramente atacada por los que no Me aman, se moverán contra el Vaticano.
Rezad hijos Míos, rezad por Francia, ha perdido la paz, vivirá con la insistencia del terror.
Orad, hijos Míos, por Nicaragua, será golpeada por la Naturaleza, temblará, sufrirá a causa de sus volcanes.
Rezad por Costa Rica, será sacudida.
Rezad por Venezuela, la Naturaleza se hará presente con fuerza.
Rezad por Colombia, será sacudida con fuerza.
Niños, continuad con la purificación de los sentidos. Y esta semana, junto con la purificación de la vista, continuad purificando el sentido del oído, ya que éste lleva lo que oye al pensamiento, a la memoria, y los enferma.
«Recordad lo que habéis recibido y oído; ponedlo en práctica y arrepentíos, porque si no permanecéis despiertos, vendré como un ladrón, sin que sepáis a qué hora os sorprenderé». (Ap. 3:3)
Al oír que te llamo a no pecar, debes saber que Mi deseo es guiarte para que limpies tu memoria y encuentres la libertad.
Pueblo MÍO, es esencial que cada uno de Mis hijos siga purificando el sentido del OÍDO. Los sentidos físicos del hombre deben entrar en armonía con el espíritu. Continuaréis con el sentido del oído, el sentido de la audición, durante una semana. Cada instante os dedicaréis a purificar el sentido del oído, hasta que esté rendido para complacer Nuestra Voluntad y para el mayor bien del alma.
PRIMER DÍA DE LA SEGUNDA SEMANA
Ofrezco el Don de la audición, en este día, a los Sacratísimos Corazones de Jesús y de María Santísima.
Les ofrezco este Don de la audición en este instante para la Gloria Divina y para el bien de las almas. En cada acto presente, mi memoria y mi pensamiento permanecerán atentos, alertas, para no acumular lo que mi oído escucha y que hace que se retenga el pecado, ofendiendo a los Sacratísimos Corazones.
Dame la fuerza de escuchar sólo lo que es para el bien de mi alma y de mi hermano o hermana. Clamo a Ti, Madre Santísima, para que me tomes como discípulo, guíes mi vida y mi camino se encamine hacia el encuentro con Tu Hijo.
EN EL DESPERTAR OFREZCO:
Tengo oídos y con ellos oigo el bien y el mal.
Desde este instante ofrezco mi esfuerzo constante para que este Don se haga más espiritual, priorizando el deseo Divino de mi salvación personal. Me propongo liberar mi oído de ocasiones de pecado, buscando el propósito Divino en todo lo que oigo, recordando el bien que cada hermano y hermana me ha proporcionado y escuchando en la Creación la grandeza del Padre Eterno.
No deseo pecar más con el sentido del oído,
lo entrego a los Sagrados Corazones para que, siendo Tu hijo, mi Señor, me saques del pecado.
No quiero que lo que he oído me siga provocando malos pensamientos ni que descuide las bondades Divinas que me llevan a permanecer en estado de Gracia. Sagrados Corazones, sostened mi memoria y mis pensamientos para que mi audición me lleve a retener sólo lo que es bueno.
Retengo mi libre albedrío y lo someto inmediatamente y lo entrego a los Sagrados Corazones, para que me liberen de las ocasiones de falta, y así moldeen mi oído para que traiga a mi memoria sólo lo que es para el bien de mi alma y para que haga el bien a mis hermanos y hermanas.
Que mis oídos sean limpiados en el Agua Purificadora del Amor que viene de los Sagrados Corazones. Amén.
MEDIO DÍA:
Repasa con Nuestra Madre los esfuerzos de la mañana y anota los puntos débiles.
ANTES DE DORMIR
Doy gracias a los Sagrados Corazones de Jesús y de María Santísima, a quienes pido socorro para ser mejor hijo de Dios.
Padre Nuestro, tres Avemarías y Gloria.
HIJOS, Venid a Mí, y confiadme vuestra vida.
Yo te bendigo. Te Amo.
Vuestro Jesús.
SALVE María Purísima, Concebida Sin Pecado
SALVE María Purísima, Concebida Sin Pecado
SALVE María Purísima, concebida sin pecado
Origen: ➥ www.RevelacionesMarianas.com
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