Viernes, 21 de marzo de 2008

Jesús dijo: “Mi gente, la descripción de Mi Pasión y muerte en la cruz es muy triste y gráfica, que tuve que morir sin cometer ningún crimen. Pero tenía un mundo que salvar y el precio de sus pecados era muy pesado. Sufrí mucho en Mi flagelación, llevando Mi cruz, siendo clavado a la cruz, y agonizando sin poder respirar. Después de Mi muerte, vieron lo último de Mi Sangre y agua brotar cuando la lanza perforó Mi costado. Cuando tengan algún dolor en esta vida, les parecerá nada comparado con lo que tuve que sufrir por cada uno de ustedes. Ahora, honren Mis tres días en la tumba en silencio y oscuridad, hasta que salí a la vida en Mi Resurrección el Domingo de Pascua. Sé que están apenados porque sus pecados Me causaron tanto sufrimiento. Todavía estoy sufriendo incluso ahora por los pecados de la humanidad. Pidan Mi perdón por sus pecados mientras renovo la gracia en su alma en cada Confesión que hagan. Trabajen en sus penitencias como un pequeño pago para expiar sus pecados. Los amo en Mi sacrificio, y quiero que Me amen a cambio.”