domingo, 1 de mayo de 2016

Mensaje de María Santísima

(María Santísima): Mis queridos hijos, hoy de nuevo vengo a invitaros al amor. Lo que dije ayer con mi hijita Luzia Aquí, lo repito hoy. Rezad cada día y durante todo el día este pequeño Acto de Amor: ¡Jesús, María, José os amo salvad las almas!

Que por cierto mi hijito Marcos os enseñó a rezar hace muchos años. Este pequeño Acto de Amor repetido incesantemente durante todo el día quemará vuestros corazones con Mi Llama de Amor. Dará a vuestros corazones el deseo de amar más a Dios, de amarme más a Mí, de amar más a José y también de amar más a las almas, y de trabajar y luchar por su salvación como tantos Santos han hecho y como Mi hijito Marcos ha hecho aquí durante más de 25 años.

Sí, la Llama de Amor que tiene por Mí, por Mi Rosario y que le llevó a hacer tantos Rosarios Meditados para Mí, difundirlos y hacer que tantos miles de personas rezaran el Rosario Meditado. Esta Llama de Amor Yo se la di, pero esta llama fue aumentada por él por los continuos Actos de Amor que hizo a lo largo de todos estos años.

Sí, Juan el Bautista fue calificado como la voz que clama en el desierto y Yo te califico a ti Marcos, Yo califico a mi hijo Marcos como el Acto Incesante de Amor y también Llama Incesante de Amor.

A Mis hijos estoy dispuesto a darles Mi llama de Amor, pero sólo crecerá en los corazones de aquellos que, como Mi hijito Marcos, la hagan crecer a través de muchos actos de amor, de sacrificio, renunciando a su propia voluntad, renunciando al sueño, al descanso e incluso a la comida para entregarse y sacrificarse más por Mí.

Sólo así Mi Llama de Amor crecerá en vuestros corazones como lo hizo en el corazón de Mi hijo Domingos de Gusmão, que ya estaba dotado de una gran gracia, de una gran virtud y de una gran Llama de Mi amor al nacer. Pero que transformó esta Llama en un verdadero fuego incontrolable por el ejercicio de las Virtudes, por su esfuerzo y sus oraciones.

Así pues, hijos Míos, rezad el Acto de Amor Incesante durante todo el día haciendo la oración mental, incluso en los trabajos, incluso en las prisas de vuestro día, de vuestra jornada. Y Mi llama de Amor crecerá en vuestros corazones dándoos el deseo de amar, de reparar y de enmendar a Dios en estos tiempos de odio a Él, a la Fe Católica y a Mí.

En estos tiempos de desprecio a Mi Rosario y a todas las Santas Oraciones que os he dado, el Acto incesante de Amor convertirá vuestros corazones en hornos ardientes de amor al Rosario. Y realmente hará que queméis todos los corazones que encontréis de amor por Mi Rosario, por Mis Oraciones y por Mí. Y entonces, Mi Llama de Amor destruirá la llama del demonio, que es la llama del desprecio por Mi Rosario, por Mi Rosario, por las oraciones que os he dado, por Mí y por Dios.

Entonces será el Triunfo de mi Corazón Inmaculado y llegará por fin mi victoria definitiva y se cumplirá por fin la promesa que hice a mi hijo bendito Alano de La Roche: ¡Un día, por medio de mi Rosario, mi Corazón triunfará y el mundo se salvará!

A todos bendigo con amor y pido: Seguid rezando Mi Rosario todos los días como os explicó Mi hijo Marcos, como os explicó Mi hijo Luiz de Montfort que hay que rezarlo para tener méritos, méritos. Y entonces, os prometo que derramaré sobre todos vosotros la abundancia de Mis gracias maternales.

A todos bendigo a Fátima, Pompeya y Jacari».