sábado, 3 de septiembre de 2016

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

Hoy, una vez más, nuestra Santísima Madre vino del cielo para bendecirnos y transmitirnos su mensaje. Vino dentro de esa hermosa luz que la rodea: luz de paz, amor y gracia. Tenía una hermosa sonrisa. Acabábamos de rezar 2.000 Avemarías y se las ofrecimos para que se realizaran sus planes maternales y para el bien del mundo. Ella dijo

¡Paz mis queridos hijos, paz!

Hijos míos, yo, vuestra Madre, vengo del cielo para pediros que hagáis de vuestras vidas una ofrenda de amor a Dios. Rezad para abrir vuestros corazones a Dios. Sed obedientes a su llamada. Me envía desde el cielo porque os ama y os quiere bien. Hijos míos, vivid el amor y la paz en vuestros hogares, con vuestra familia. No tengáis penas en vuestros corazones. Sabed perdonar a los que os han ofendido. Sabed amar a los que os persiguen y venceréis todo mal y tendréis la bendición de mi Hijo Jesús. Estoy aquí para acogeros en mi Corazón Inmaculado. Deseo poneros bajo mi manto protector para que estéis seguros y en paz. Llevad el amor de mi Madre a todos mis hijos y sed los que viven en el amor, para que el mundo se renueve y se convierta. Gracias por vuestras oraciones y por vuestra presencia aquí esta tarde. Vuestras oraciones han ayudado a salvar muchas almas y a convertir a muchos pecadores. Sed una luz para los que están en tinieblas, lejos de Dios. Rezad, rezad, rezad. Volved a vuestros hogares con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.