jueves, 13 de abril de 2000

Mensaje de Nuestro Señor a Edson Glauber

¡La paz esté contigo, mi amado hijo!

Me preguntas qué quiero de los jóvenes? Además de santidad, quiero una vida llena de obras de amor hacia los demás, especialmente hacia tus otros hermanos y hermanas jóvenes que aún no han experimentado el amor en sus vidas.

Hay tantos que se están destruyendo por falta de amor. Vívelo ustedes mismos, ante todo, y luego llévalo a tus hermanos. Cada uno de ustedes es responsable de su propia felicidad. No te rindas en tu camino espiritual, sino con confianza en mí, sigue el camino que Yo y Mi Santísima Madre estamos tejiendo para ti.

Es necesario que también vivas la humildad. Si eres humilde entonces Yo puedo hacer todo, pues me estarás permitiendo estar siempre a tu lado para ayudarte. A todos mi bendición: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!

Jesús estaba sentado en un trono muy hermoso y estaba vestido como un Rey, teniendo en Su cabeza una hermosa corona y un cetro en Su mano derecha. Me miró y dijo:

Ves que Yo soy Rey: ¡el Rey de todos los jóvenes!...Ser joven es amar a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza!...Ser joven es ser un verdadero apóstol mío!...Ser joven es ser totalmente de Dios!...Ser joven es amar a Mi Santísima Madre como a tu verdadera Madre!...Ser joven es ser verdaderamente un santo para Dios. Amo a la juventud y los mantengo en Mi Corazón. Te bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!